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Especial Política: Elecciones Europeas Hungría

El centro derecha gana las Europeas

El centro derecha retendrá el poder en el Parlamento Europeo en unas elecciones que dejaron el record de baja participación y que podría haber traído mucho peores resultados a los gobiernos nacionales. El Partido Popular Europeo obtendría 267 escaños, lo que representa el 36´27% de los votos, mientras que los Socialistas Europeos conseguirían un 21´60%, 159 escaños.

En Hungría, la oposición conservadora del partido Fidesz obtuvo una victoria aplastante con el 56% de los votos. El partido del gobierno, los socialistas de MSZP, quedaron segundos con el 17% de los votos, mientras que el partido de ultraderecha Jobbik (Movimiento por una Hungría Mejor) ocupó la tercera posición con un 14% de los votos. Por otra parte, el partido Forum Democratico Hungáro (MDF) enviará un diputado a Estrasburgo gracias al 5´4% de los votos y el partido de la izquierda liberal, SZDSZ no llegó al 5%, por lo que por primera vez se queda sin representantes.

Especial Política: Elecciones Europeas Hungría

Fidesz obtiene la mayor mayoría de la UE desde que se celebran las europeas, esto arroja dos conclusiones: Primero el aumento de poder de los conservadores húngaros dentro del partido conservador europeo, lo que puede hacer tener más peso en las decisiones. Segundo la cada vez más cercana toma de poder del partido en Hungría, ya que se acercan las elecciones de 2010.
Su líder, Viktor Orbán, bajo el lema "Basta” expresó su satisfacción por los resultados, explicando que los votantes han votado el cambio y una nueva dirección, dando a entender unas posibles elecciones anticipadas, ya que éste, ya se ve gobernando el país.

En el lado malo de los resultados ó efectos negativos de las europeas, se encuentra el aumento de la ultra derecha, la cual es una realidad en Hungría, su discurso es claramente de corte racista y ultranacionalista, y cuenta en sus filas con los miembros de la Guardia Húngara, milicia paramilitar de incuestionable parafernalia fascista.
Su líder, la abogada de derechos humanos, Krisztina Morvai, la cual niega ser antisemita o racista, asegura no querer que Hungría se convierta en una colonia de Europa, hundiendo a sus habitantes en la pobreza y siendo esclavos en su propio país.
Desde Fidesz se espera que el partido sea pacífico y más moderado para poder llevar a cabo acuerdos mayoritarios de corte conservador.

Por otro lado SZDSZ no ha conseguido un solo escaño y se enfrenta con una crisis importante. Ha sido superado no solo por Jobbik, sino por otros dos partidos minoritarios: MDF y LMP (La Política puede ser Diferente). El líder de SZDSZ Gábor Fodor puso su cargo a disposición del partido en el momento de conocerse los resultados. Calificó de castigo de los votantes, los resultados obtenidos y expresó que deben analizarse las causas de este fracaso.

El partido MDF de Ibolya Dávid incluyó en cabeza de sus listas al prestigioso ex ministro de economía Lajos Bokros, considerado un gurú de la economía de crisis por el éxito de su paquete de reformas implantadas en los años 90.
Mientras tanto, el partido alternativo de los verdes, LMP, mediante su líder, Tímea Szabó, avisa de la tendencia peligrosa que esta tomando la política húngara. Y apuntó a que la necesidad real de Hungría es reconstruir la confianza en la participación democrática.

Por último, queda para la reflexión de los socialistas que les ha llevado a desmejorar tanto su imagen hasta el punto de crear un sentimiento extremo hacia la derecha, les esperan años de reflexión y cambio, de lavar la imagen y de recuperar la confianza de un pueblo, que se perdió hace ya más de 2 años. Peter Kiss, vicepresidente de MSZP, expresó su apoyo y el de su partido al actual presidente del Gobierno, Gordon Bajnai, diluyendo cualquier posibilidad de elecciones anticipadas. Kinga Göncz, cabeza de lista en las europeas, y con el eslogan "No voto a la derecha, porque cooperan con radicales” cree que el partido de la oposición dejo fuera de las elecciones la palabra "Europa” y se centro en criticar a su partido.

En términos generales, la participación en toda la UE fue del 43´55%, mínimo histórico, por ejemplo en Hungría fue del 36% de los casi 8 millones de personas que estaban llamadas a las urnas. Los gobiernos nacionales sufrieron un revés en países como Irlanda, Grecia, Bulgaria, España y la propia Hungría.
Como nota a destacar, el ascenso de la ultra derecha y los euroescepticos, no solo en Hungría, sino también en países como Holanda donde han conseguido cuatro escaños, también en Finlandia, Gran Bretaña, Austria y Rumanía, donde la derecha ha conseguido representación.